Un estudio del Instituto de Salud e Investigación Médica francés muestra que los ancianos que presentan mucho sueño durante el día tienen un riesgo más alto de morir a causa de algún problema cardíaco. Para la investigación, dirigida por Jean Philippe Empana, se realizó un seguimiento a 8.269 individuos de la tercera edad, durante seis años.

Los participantes fueron sometidos a un chequeo físico, que incluía la revisión del estado de sus arterias carótidas a través de ultrasonidos, en primera instancia. Además, tuvieron que completar un cuestionario sobre cómo era su sueño donde debían responder -entre otras cosas- si nunca, raramente, regularmente o frecuentemente sufrían una excesiva somnolencia en el día.

Luego, los investigadores cruzaron los datos obtenidos, comprobando que aquellos individuos que tenían mucho sueño durante la vigilia presentaban un riesgo de mortalidad un 33 por ciento superior al del resto, independientemente de otros factores de riesgo. Descartaron, a través de la comprobación del estado de los vasos sanguíneos de los participantes, la posible influencia de la arteriosclerosis.

El equipo científico aclara en sus conclusiones, según la información de El Mundo Digital, que es necesario realizar estudios más amplios sobre el tema para confirmar sus observaciones. Pero remarcan también los datos obtenidos podrían tener importantes implicaciones clínicas. “Indican que tener sueño durante el día no es una señal benigna sino un importante marcador para medir la mortalidad a medio plazo de las personas mayores”, señalan.

Emilio Luengo, jefe del servicio de Cardiología del Hospital Militar de Zaragoza, opina que “el siguiente paso es corroborar los resultados y demostrar cuál es la causa de que se produzcan más problemas cardiovasculares”. El profesional considera que es probable que se vaya a incluir la recomendación de preguntar a los pacientes por un estado de somnolencia excesivo durante el día en las próximas guías de actuación para profesionales.

La Sociedad Europea de Cardiología ya ha emitido un comunicado en el que recomienda a los profesionales sanitarios estar alerta ante estas señales. “Preguntar a los pacientes la simple cuestión de si se sienten somnolientos durante el día puede ser una forma útil de identificar a un subgrupo de pacientes de avanzada edad que estén en alto riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular y requieran un seguimiento más específico”, dijo Guy De Backer, portavoz del organismo.

Según explica “existe un conocimiento desde antiguo de esta relación entre la somnolencia y un mayor riesgo de muerte en ancianos”. Sin embargo, tal como remarca, hasta el momento no se había realizado un estudio epidemiológico tan amplio sobre el tema.